Ya sabéis, soy un señor mayor, con cosas de señor mayor. Entro en mi sala de ‘charrar’, y dale que te pego. Siguen hablando de lo mismo, casi lo único, que si la mierda de enfermedad esa de las máscaras. Como son amigos y conocidos, hago por cambiar de tema, “Güenas” y qué me podéis decir del canon digital. Silencio total, no se escucha ni el vuelo de una mosca. Ha pasado un Ángel.
Leo de la Wikipedia a mis contertulios: El canon digital o canon por copia privada es una tasa aplicada a diversos medios de grabación y cuya recaudación reciben los autores, editores, productores y artistas, asociados a alguna entidad privada de gestión de derechos de autor, como compensación por las supuestas copias que se podrían hacer de sus trabajos en el ámbito privado. En algunos países, estas copias están reconocidas por el derecho de copia privada, mientras que en otros infringen la normativa de derecho de autor.
Mucho queda por decir de esta sangría, por ejemplo, una impresora cuesta seis euros más, y que se supone que hago con ella en la empresa; fotocopiar los libros de los autores, un disco duro sube con el impuesto casi seis euros más, y es porque en él duplico todas las películas del mundo. Un pendrive cuesta con el canon veinticinco céntimos más, porque en él copiamos toda la música. Un móvil, un portátil, cuestan seis euros más. Somos piratas y hay que pagarlo para que nuestros autores puedan vivir.
Y quién recauda este dinero en nuestro país, el estado público, y quién lo recibe, una serie de personas muy bien situadas en puestos de administración de sociedades privadas que gestionan los derechos de autor. Es más, estos organismos hacen de intermediarios con los autores, pues son sus representantes aquí en la tierra como en el cielo. Y por supuesto se encargan de repartir el botín. ¿Cuánto le llegará al músico de una orquesta?, ¿al escritor o al dibujante novel?... Esos son los misterios de la fe.
Se da por entendido que he utilizado para hablar un medio alto conocido, el Discord, en mi época usábamos el Skype o el Team. En estas plataformas, se crean cuentas, y algunos usuarios montan salas, en donde a través del micrófono podemos hablar. También utilizamos un periférico para vernos; la webcam. Estos aparte de cámara suelen llevar micrófono. Este tipo de comunicación es en directo, como la telefonía. Y aunque haya canales de chat para hacer llegar mensajes, lo normal es estar y comentar.
No soy mucho de meterme en salas de cotilleo, como tampoco me gusta ver programas de salseo. No es que sean malos o buenos, simplemente me aburren supinamente. Pero de vez en cuando aprovecho mi cuenta y veo lo que está diciendo por ahí el personal. Yo entro en mis salas de estudios o de trabajo, esto es más serio y se tocan temas solo referentes al propósito de la sala, y ni que decir tiene que entro en las salas de ocio y juegos por ordenador, mucho más instructivas y entretenidas. Es otra forma de comunicarse, no hace falta estar en contacto con la persona físicamente. Las distancias y los horarios ya no son una traba para poder mantener una conversación.
La era de las comunicaciones, tener internet es tener una ventana abierta al mundo. Y poder hablar y ver a tus amigos, compañeros, amantes, etc… sin necesidad de estar presente, es otra forma de comunicarse. No voy a decir que sea el paradigma de la humanidad, pero tampoco lo son los dibujos animados y quién puede vivir sin ellos.
Y como soy un señor mayor, que se ha criado en el respeto mutuo y la cortesía de dejar hablar al prójimo. Termino de leer la Wiki y me dispongo a escuchar. Sabéis que se acerca otra ola de la enfermedad y que se habla de una fase…
Angelito´S
