Ya sabéis, soy un señor mayor, con cosas de señor mayor. Son muchos los que se definen como padres de la informática. Es más, son demasiados los que consideran a la informática una ciencia, aunque más bien es una herramienta que se aprovecha de las demás ciencias y tecnologías para automatizar el tratamiento de la información. Esta tecnología bebe del conocimiento de un sinfín de personas, matemáticos, físicos, escritores, filósofos y demás cocos del mundo mundial.
Lo que me lleva al caso de mi particular homenaje a los que considero aportaron mayor prestigio y avances tecnológicos a la profesión que práctico. Pero al elegir a los siguientes personajes no quiero que se vea como un menosprecio a las aportaciones que hicieron otros. No los elijo por su importancia ni méritos personales, simplemente es la selección que más me gusta y que veo de mayor interés profesional.
Atrhur C. Clarke, nacido en 1917, escritor inglés, tras graduarse en sus estudios participó en la Segunda Guerra Mundial como especialista de Radar de la RAF, esto le marcaría para toda su vida. Acabada la guerra estudio física y matemáticas. Clarke fue presidente de la Sociedad Interplanetaria Británica y trabajó como asistente de edición para Sciencie Abstracts, para, desde 1951, dedicarse por completo a la escritura. Desde 1956 hasta su muerte, residió en Sri Lanka. Varias de sus novelas han sido llevadas al cine, alcanzando un especial éxito, 2001, una odisea del espacio. Fue autor de libros de divulgación científica y de ciencia ficción. De entre su obra habría que destacar títulos como 2001 y sus secuelas, Cita con Rama, Las arenas de marte, Cánticos de la lejana Tierra, Expedición a la Tierra o Cuentos de la Taberna del Ciervo Blanco. Al igual que Asimov formuló sus famosas tres leyes de la robótica, Clarke formuló asimismo tres leyes relacionadas con el avance científico. Clarke creía en el progreso y en las infinitas posibilidades que el futuro depararía al ser humano: "Cuando un científico eminente, pero anciano, afirma que algo es posible, es casi seguro que tiene razón. Cuando afirma que algo es imposible, muy probablemente está equivocado / La única manera de descubrir los límites de lo posible es aventurarse un poco más allá, hacia lo imposible / Cualquier tecnología lo suficientemente avanzada es totalmente indistinguible de la magia".
Arturito “Cósmico” Clark, se le considera el visionario que inventó nuestro futuro, a través de revistas científicas en las que publicó varias series de artículos. Pudo definir y remarcar cómo serian nuestras comunicaciones, cómo nos expandiríamos por el universo e incluso cómo llegaríamos a contactar con civilizaciones extraterrestres. Este héroe del conocimiento futuro, no solo fue un científico, sino que creó toda una filosofía de los viajes espaciales, ahondando en lo profundo del espacio y del ser humano. Recibió muchos honores y premios, y murió a los noventa años tras una larga enfermedad degenerativa dejando un gran legado de literatura de ciencia ficción y sobre todo de esbozos de cómo debe empoderarse la humanidad a través de la ciencia y por ende de herramientas como la informática y los ordenadores.
Hasta aquí su historia real. Cuenta la leyenda que cuando se firmó la paz en la segunda guerra mundial, Arturito y varios de sus compañeros de cuartel fueron a celebrarlo a un pub cercano. Allí mientras todos hablaban de qué iban hacer después de licenciarse, Clark esbozaba en un cuadernillo, que siempre llevaba, unos dibujos extraños. Al ser requerido por sus camaradas de qué estaba dibujando, les explicó cómo podrían ser las comunicaciones en el futuro si lanzaban tres satélites geoestacionarios al espacio. Cómo podría retrasmitirse radio, televisión y telefonía sin cable alguno a todos los lugares del mundo. Todos sus compañeros radaristas creyeron en lo que decía, y esto le llevó a publicar varios artículos en una revista científica. Unos años después navegaría en el espacio el primer satélite soviético, Sputnik.
A este señor lo considero mi cuarto padre fundador. No solo por inspirar e inducir a un futuro globalizado de comunicaciones y unos ordenadores increíblemente potentes, sino por su maravillosa obra literaria que me ha dado fantásticos momentos de satisfacción personal.
Y como soy un señor mayor, me vienen a la mente unas frases de HAL 9000 en la película de Kubrick, 2001 una odisea del espacio:
-Hal, tienes una gran responsabilidad en esta misión quizá la más importante de cualquier elemento de la misión. Eres el cerebro y el sistema nervioso de la nave. También eres quien vigila a los tripulantes en hibernación. ¿Alguna vez te ha provocado alguna inseguridad? -Déjeme decirlo de esta forma, Sr. Amer. La Serie 9000 es la computadora más fiable construida nunca. Ninguna computadora 9000 se ha equivocado ni ha distorsionado información. Todos somos, bajo cualquier definición infalibles e incapaces de cometer ningún error. -Hal, a pesar de tu gran intelecto, ¿nunca te sientes frustrado por depender de las acciones de los humanos? -En absoluto. Me gusta trabajar con los humanos. Tengo una relación estimulante con el Dr. Poole y el Dr. Bowman. Mis responsabilidades en la misión cubren toda la operación de la nave así que estoy constantemente ocupado. Estoy poniendo en uso todas mis capacidades lo cual es lo máximo a lo que puede aspirar una entidad consciente.
Angelito´S
